El dióxido de titanio en la pasta de dientes

Dióxido de titanio como colorante alimentario E171

Conocido en los alimentos como colorante E171, su blancura y brillo únicos, su estabilidad al calor y a la luz, y su absorbancia UV convierten al dióxido de titanio en el colorante alimentario blanco más eficaz.

De hecho, es hasta cinco veces más eficaz que otras alternativas, por lo que se necesitan cantidades relativamente pequeñas de E171 para lograr el efecto deseado.

Tras décadas de uso como colorante alimentario, no se ha demostrado en ningún caso que haya un vínculo verificable entre la ingesta general de E171 y efectos perjudiciales para la salud humana.

¿Por qué se utiliza el E171 en los alimentos?

El E171 se utiliza como colorante en los alimentos para darles un efecto de brillo o blanquearlos. Además, añade textura a los alimentos y a menudo se utiliza como agente antiaglomerante.

¿Es seguro ingerir el E171?

A lo largo de los años, el E171 se ha sometido a rigurosas pruebas y clasificaciones europeas, cuyos resultados han confirmado repetidamente su seguridad para los consumidores.

La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA, por sus siglas en inglés) revisó la seguridad del E171 en 20162018, mayo de 2019 y junio de 2019. En todos los casos, la EFSA confirmó la seguridad del E171.

El último dictamen de la EFSA sobre el E171, publicado en mayo de 2021, no arroja pruebas concluyentes que demuestren que la ingesta del E171 tenga efectos nocivos.

Sin embargo, la EFSA concluyó que ya no considera al E171 seguro cuando se utiliza como aditivo alimentario porque no se han podido descartar problemas relacionados con la genotoxicidad. Y ello a pesar de que la misma EFSA concluyera anteriormente que “el uso del TiO2 como aditivo alimentario no plantea un problema genotóxico”.

La TDMA ha evaluado el dictamen de la EFSA y ha hallado problemas importantes en el enfoque de la EFSA para llegar a sus conclusiones.

¿Por qué ha cambiado la EFSA de opinión respecto a la seguridad del E171?

Este cambio de opinión obedece a que el dictamen de la EFSA de 2021 no tiene en cuenta todos los datos disponibles relativos a la seguridad del E171.

En la elaboración de su último dictamen, la EFSA adoptó un nuevo enfoque que excluye del conjunto de datos científicos correspondiente al E171 determinados componentes relevantes que no demuestran efectos genotóxicos nocivos. La EFSA llegó a esta conclusión tras el análisis de materiales de pruebas que no son representativos del E171, ni pertinentes para la evaluación del E171 cuando se utiliza como aditivo alimentario.

Los métodos de exposición oral en los que se fundamenta la EFSA, y los estudios utilizados para llegar a su conclusión, no representan condiciones de uso realistas o potenciales, ni reflejan exposiciones humanas al aditivo alimentario real.

¿Por qué ya no se permite el E171 en los alimentos en la UE?

La Comisión Europea retiró la autorización del uso alimentario del E171 en la UE el 18 de enero de 2022. Esta decisión, que entró en vigor el 7 de febrero de 2022, se basa en el dictamen de la EFSA de que el E171 ya no puede considerarse seguro.

El Reglamento establece claramente que no se han detectado problemas de salud inmediatos. Esto subraya que la decisión no se basa en ningún riesgo identificado del E171 para la salud humana.

La ley prevé un período de transición de 6 meses desde su entrada en vigor. De este modo, hasta el 7 de agosto de 2022, podrán salir al mercado de la Unión Europea productos alimenticios que contengan E171 y comercializarse hasta su fecha de caducidad.

Los productos que contengan E171 pueden seguir consumiéndose con seguridad durante el período de transición, ya que no se ha identificado ningún riesgo inmediato para la salud.